A destiempo suele llegar la muerte, demasiado pronto, demasiado puntual incluso demasiado tarde. Qué pocas veces el sueño eterno culmina los sueños de una vida. Ha muerto uno de los escritores que más ha jugado con ella y con el tiempo que se nos presta. Desde nuestro MILHOJAS queremos recordar a Agustín García Calvo, filólogo, traductor, filósofo, escritor, profesor e invitaros a acercaros a su obra llena de vitalismo desbordante e irreverencia brillante.
LIBRE TE QUIERO
Libre te quiero,
como arroyo que brinca Fotografía de Elene Usdín
de peña en peña.
Pero no mía.
Grande te quiero,
como monte preñado
de primavera.
Pero no mía.
Buena te quiero,
como pan que no sabe
su masa buena.
Pero no mía.
Alta te quiero,
como chopo que al cielo
se despereza.
Pero no mía.
Blanca te quiero,
como flor de azahares
sobre la tierra.
Pero no mía.
Pero no mía
ni de Dios ni de nadie
ni tuya siquiera.
Agustín García Calvo
(Canciones y soliloquios, 1976)
Libre te quiero,
como el viento
que difunde el pensamiento
Pero no mía.
Libre te quiero,
como mi corazón
lleno de sentimientos.
Pero no mía.
Libre te quiero,
como brisa que vuela y acaricia
cada mañana.
Pero no mía.
Libre te quiero,
como lienzo que,
recien estrenado en que,
el pintor se expresa.
Pero no mía.
Libre te quiero,
como el viento
acaricia nuestros cabellos.
Pero no mía.
Libre te quiero
como el sol por la mañana
del uno al otro confin
pero no mia
Libre te quiero,
como polluelo que arranca
en su primer vuelo.
Pero no mía.
1ª opción:
Libre te quiero,
como los ángeles que
por entre las nubes vuelan.
Pero no mía.
2ª opción:
Libre te quiero,
como mis latidos
que por ti laten.
Pero no mía.
(corrección)
Libre te quiero
como el surfero que va
de ola en ola.
Pero no mia.
Libre te quiero,
como la brisa
de la mañana.
Pero no mia.
Libre te quiero como
el rocío en las hojas
al amanecer.
Pero no mía.
Libre te quiero,
como lágrima escurridiza
por tu mejilla.
Pero no mía.
Libre te quiero,
como la lluvia
que alimenta los campos.
Pero no mía.
Libre te quiero,
como agua que mana
sin cesar del arroyo
pero no mía.
Libre te quiero,
como el suerfero que va
de ola en ola.
Pero no mía.
Libre te quiero,
como cordel cabalgando
por miles pampas.
Pero no mía.
(Corrección)
Libre te quiero,
como corcel cabalgando
por miles pampas.
Pero no mía.
Libre te quiero,
como la cálida brisa
que despierta cada primavera.
Pero no mía.
Libre te quiero,
como el sol en el cielo
cada mañana.
Pero no mía
Libre te quiero,
como música llenando espacio vacío
fuera del pentagrama.
Pero no mía.
Libre te quiero,
como mis recuerdos
en el corazón.
Pero no mía.
Libre te quiero,
como mis pensamientos
en la pradera soñada.
Pero no mía.
Libre te quiero,
como recuerdo pasajero
en tu corazón.
Pero no mía.
Libre te quier,
como una nube
en el cielo.
Pero no mía.
Libre te quiero,
como pájaro en su vuelo
de rama en rama.
Pero no mía.
Bravísimo!!!
Libre te quiero,
como las olas batiendo
de roca en roca.
Pero no mía.
Eres toda una poetisa!!!! Estupendo, Marina.
Gracias 🙂